Navegando por las procelosas aguas de internet te puedes encontrar casi cualquier cosa, y algunas veces son curiosidades que llaman la atención, como esta fotografía de la izquierda.
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La fotografía es elegante y tiene más fuerza así con las muchachas de espaldas que no de frente.
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Enseguida me ha venido a la cabeza la imagen de una lata de sardinas.
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No, no porque estén para comérselas como las sardinas, que también, me ha hecho gracia, ja, ja, porque están puestas o dispuestas como las sardinas de una lata.
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Supongo que en internet habrá circulando algún estudio acerca de la forma de las latas. En sardinas sólo está, en este tamaño de andar por casa, este rectangular con las esquinas redondeadas mientras que, por ejemplo, para el atún hay este mismo, el circular y el cuasi elíptico.
Ya digo que sus razones habrá.
Las tres muchachas son hermanas, las hermanas Dahm, que siendo tres son trillizas, como las que acompañaban a Julio Iglesias hace... , puf, muchismos años. Lo de las trillizas está claro pero nunca me aclaro con la diferencia entre gemelos y mellizos. La verdad es que no conozco ningún caso cercano y no he perdido el tiempo en averiguarlo.
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Me imagino si hubiera tres Zapateros y me entran escalofríos.
Ahora que con tres Rajoys tampoco da para tener un Aznar.
Ahora que con tres Rajoys tampoco da para tener un Aznar.
Nada, me quedo con las hermanas Dahm, que tienen casi nombre de cerveza.
Claro que ya puestos a pedir, imaginar o soñar, hay unas latas más grandes.
Cuento 20 sin las dos del centro.
¿Veintillizas?, y ¿todas rubias?
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