Luchando contra el tiempo, Berta deberá resolver, con su ingenio y su valor, los tres casos en los que trabajaba su padre antes de que el asesino vuelva a intentarlo. Tres casos tras los cuales se esconde el culpable: ¿una mujer que engaña a su marido?, ¿un chico al que su padre hace seguir para evitar que tome drogas? o ¿una muchacha desaparecida, que se ha escapado de casa con su novio?
El caso del falso accidente es la primera novela de Berta Mir, joven de dieciocho años hija de un detective.
El autor aprovecha la trama del libro, las tres historias que se cruzan en el mismo, para denunciar y condenar la corrupción que rodea a los ricos, no menciona a los políticos –sí, menciona a uno, a Aznar para acusarle de la “ilegal” guerra de Irak- y para lanzar mensajes a los jóvenes sobre el peligro de las drogas.
Ejemplo de esos libros que van dirigidos a la juventud y que pretende alertar de peligros y de alentar sobre verdaderos valores que deberían ser universales.
La pena es la alusión a lo de la guerra de Irak. Alguien dijo que una mentira repetida mil veces se convierte en verdad. Pues eso.
De fácil lectura la novela es interesante y entretenida pero me ha dejado un gusto amargo por la estupidez de incluir ese comentario que el autor sabe falso. Y si no lo sabe, ¡qué pena!. Me pensaré continuar la saga.
No leí nada de este autor pero, cada vez que vo un libro suyo, me acuerdo de vos.
ResponderEliminarUn saludo
PD: De esa misma colección, tengo uno de Rodolfo Walsh
¡Cuánto tiempo!
ResponderEliminarTe haces caro de ver.
Rodolfo Walsh, lo apunto.