El diablo de los números
Der Zahlenteufel. Ein Kopfkissenbuch für alle, die Angst vor der Mathematik haben
Hans Magnus Enzensberger
Hans Magnus Enzensberger
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Traducción de Carlos Fortea
Ilustraciones de Rotraut Susanne Berner
Edita Siruela
22ª edición: junio de 2006 (1ª ed en noviembre de 1997)
258 páginas
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A Robert no le gustan las Matemáticas, como sucede a muchas personas, porque no las acaba de entender.
Pero una noche él sueña con un diablillo que pretende iniciarle en la ciencia de los números. Naturalmente, Robert piensa que es otra de sus frecuentes pesadillas, pero en realidad es el comienzo de un recorrido nuevo y apasionante a través del mundo de las Matemáticas.
¿No es extraño hallar siempre secuencias numéricas por la simple multiplicación de los unos:
1 x 1 = 1
11 x 11=121
111111 x 111111 = 12345654321
y así en adelante?
Y esto es sólo la operación más sencilla. Durante doce noches, Robert sueña sistemas numéricos cada vez más increíbles.
De pronto, los números cobran vida por sí mismos, una vida misteriosa que ni siquiera el diablo puede explicar del todo. Nunca las Matemáticas habían sido algo tan fascinante. Pronto, el diablo le hará abandonar los tópicos escolares y hará que acceda a niveles superiores: ¡y aun así los entiende!
Y el joven lector también. Los números, cada página que pasa, se van volviendo cada vez más absorbentes. Es como magia, y Robert quiere saber más y más basta que, al fin, el diablo le hace comprender que algunos problemas y paradojas pertenecen a las altas esferas de la ciencia.
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Hace unos días una de mis hermanas me pidió información sobre libros que tuvieran que ver con las matemáticas y que se pudiera recomendar su lectura a adolescentes y mirando en la librería me encontré con este libro que se me había despistado.
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Las noches de Robert y el diablo de los números son muy entretenidas, se aprende mucho y las ilustraciones dan mucha fuerza al relato.
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Yo ya he leído el libro, ahora tengo que encontrar un conejillo de indias de más de 10 años a ver si le gusta o no.
A mí sí lo ha hecho.
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El libro se puede leer aquí.
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22ª edición: junio de 2006 (1ª ed en noviembre de 1997)
258 páginas
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A Robert no le gustan las Matemáticas, como sucede a muchas personas, porque no las acaba de entender.
Pero una noche él sueña con un diablillo que pretende iniciarle en la ciencia de los números. Naturalmente, Robert piensa que es otra de sus frecuentes pesadillas, pero en realidad es el comienzo de un recorrido nuevo y apasionante a través del mundo de las Matemáticas.
¿No es extraño hallar siempre secuencias numéricas por la simple multiplicación de los unos:
11 x 11=121
111111 x 111111 = 12345654321
y así en adelante?
Y esto es sólo la operación más sencilla. Durante doce noches, Robert sueña sistemas numéricos cada vez más increíbles.
De pronto, los números cobran vida por sí mismos, una vida misteriosa que ni siquiera el diablo puede explicar del todo. Nunca las Matemáticas habían sido algo tan fascinante. Pronto, el diablo le hará abandonar los tópicos escolares y hará que acceda a niveles superiores: ¡y aun así los entiende!
Y el joven lector también. Los números, cada página que pasa, se van volviendo cada vez más absorbentes. Es como magia, y Robert quiere saber más y más basta que, al fin, el diablo le hace comprender que algunos problemas y paradojas pertenecen a las altas esferas de la ciencia.
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Hace unos días una de mis hermanas me pidió información sobre libros que tuvieran que ver con las matemáticas y que se pudiera recomendar su lectura a adolescentes y mirando en la librería me encontré con este libro que se me había despistado.
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Las noches de Robert y el diablo de los números son muy entretenidas, se aprende mucho y las ilustraciones dan mucha fuerza al relato.
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Yo ya he leído el libro, ahora tengo que encontrar un conejillo de indias de más de 10 años a ver si le gusta o no.
A mí sí lo ha hecho.
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El libro se puede leer aquí.
Conejilla encontrada, (aunque seguro que preferirías una del Playboy)...
ResponderEliminarBromas aparte, me lo bajo y me ofrezco a leerlo, ya que tengo más de diez años, y soy de Letras...
Un abrazo
Je, je, una cosa no quita la otra.
ResponderEliminarYo sé de otra conejilla (lo siento, tampoco es del Playboy, qué se le va a hacer, amigo Caraguevo) que me extraña que todavía no haya dicho ni mu al respecto, claro que..., como es tan callada..., y a ti te gusta tanto eso..., pues supongo que os comunicáis telepáticamente...
ResponderEliminarNo se trata de llevar la contraria, pero el caso es que no recuerdo yo el libro así como muy entusiásticamente.
ResponderEliminarSerá que como tengo más de 10 años... varias veces...
Un saludo.
S. Cid: ¿De dónde has sacado que me gusta que las mujeres estén calladas?
ResponderEliminarConejitas de Playboy he visto dos veces al natural, en un vuelo de Miami a Los Ángeles y en el vestíbulo del hotel-casino Caesar's Palace en Las Vegas, siempre he lamentado no poder apreciar la inteligencia de estas chicas porque no pude entablar conversación con ellas, sólo babeaba.
posodo: Es un libro interesante para que los niños descubran los números, sobre todo las series, no de televisión, que es en lo que se centra y que tienen un reflejo gráfico inmediato y curioso.
Haber no hay grandes teoremas ni expresiones raras. Es un libro de ¿iniciación?
Un saludo a todos
Me temo que lo mío es "deformación profesional"... y me bebo este tipo de libros. Éste, en concreto, lo leí hace tiempo, y me resultó bastante entretenido, aunque me pasó un poco como con "El teorema del loro" y es que me lo habían alabado tanto que luego me desilusionó un poco.
ResponderEliminarDe estos "libros de iniciación", como lo llamas, mi preferido sigue siendo el clásico "El hombre que calculaba", con tono oriental y moraleja incluida (pero reconozco que soy bastante clásica en mis gustos). Hay un fragmento sobre "el reparto perfecto" que les suelo leer a mis alumnos cuando nos toca ver los repartos proporcionales, y algunos "alucinan"... :-)
Lo de recomendar a adolescentes... -más aún a distancia- es una difícil tarea, la verdad, porque hay un abismo de unos a otros. Demasiado para un comentario que, por definición, debe ser breve... y yo ya me he enrollado demasiado...
Saludos.
María: datos, datos, danos más datos sobre "El hombre que calculaba" para poder buscarlo.
ResponderEliminarLo de recomendar, como lo de aconsejar es siempre díficil, yo lo pongo en los libros y películas que comento para que se me entienda, pero con poca convicción por mi parte.
Un saludo
http://www.librosmaravillosos.com/hombrecalculaba/index.html
ResponderEliminarPIOOOOO
PÍO: Muchismas gracias que dicen en tu pueblo.
ResponderEliminarPero una vez dadas las gracias por el enlace al libro, así podremos leerlo, afearte con la boca pequeña, porque le has hecho los deberes a María, que ya de por sí se prodiga poco.
Repito, muchas gracias, y cuidado por la carretera.
Vaya, ya tiene excusita nuestra Harpo para no volver a abrir la boca en una temporada. Y mira que se lo habías puesto a eggs para tirarle de la lengua, ¿eh?
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