Una semana después del Club de lectura con Ángeles Caso tuvimos otro con Isabel-Clara Simó para hablar de su última novela, Un tros de cel.
No pensaba ir porque no había leído el libro ni conocía ninguna otra obra de la escritora, pero la insistencia de la responsable del Club me hizo cambiar de opinión.
Y fui sin muchas ganas.
E hice bien en ir.
Me gustó mucho la manera de hablar de la autora, se le nota que ha sido maestra, profesora de instituto en Alcoy en horario nocturno.
Aunque la charla fue en valenciano, y reconozco que no me gusta el acento de esa parte de Alicante, me fue fácil entender todo a excepción de una palabra: tendressa, que pregunté a un compañero de club y resultó ser ternura.
Aunque la charla fue en valenciano, y reconozco que no me gusta el acento de esa parte de Alicante, me fue fácil entender todo a excepción de una palabra: tendressa, que pregunté a un compañero de club y resultó ser ternura.
Las personas que habían leído el libro lo pusieron muy bien, otra preguntó si iba a salir traducido al español pero ni la autora ni el editor, que estaba presente, supieron responder.
Una pena porque me gustó, ya lo he dicho, cómo habló Isabel-Clara Simó.
Una pena porque me gustó, ya lo he dicho, cómo habló Isabel-Clara Simó.
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